miércoles, 21 de abril de 2010

vengo a ofrecer mi corazón.

Como abrir el alma al mundo,
con los miedos y desconfianzas,
como hallar esperanza con
angustia y suspicacia.

Yo no se vivir con miedo,
no se vivir con desconfianza,
quizás soy más vulnerable,
quizás más sensible, pero
yo no pierdo la esperanza,
por años que pasen,
y heridas en el alma.

Abro sinceramente mi alma,
con la fe de que ese es
el camino hacia lo bello,
con el fin de vivir
conforme a mí misma,
y encontrar lo mismo en aquellos
que se cruzan y crucen por mi camino.

No espero nada, vivo lo que siento
sueño lo que pienso,
camino despacio,
observando el universo.

Me permito sentir ternura
en todos mis momentos,
en los tristes y alegres,
en los solitarios y en los encuentros.

Porque me maravilla vivir en este mundo
tan hermoso y tan herido, tan joven y antiguo
tan lleno de emociones y confusiones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario